La ansiedad no es solo una emoción. Desde formas más leves hasta trastornos de ansiedad social y fobias no razonables, la ansiedad puede causar muchos problemas para una persona que está sufriendo. Una persona siente miedo y inseguridad, no puede reaccionar con calma y racionalidad ante situaciones de interacción social, los cambios ambientales y incluso aquellos problemas cotidianos que en realidad son bastante comunes. La conciencia que todos los temores y las sospechas no son razonables, a menudo hace que una persona se sienta culpable por no poder controlar su propia condición, por lo que la ansiedad aumenta, y la persona simplemente "gira", en vano. Tales trastornos, por lo general, afectan la vida social y profesional, ¡así, no debe ignorarlos!
Puede ser una buena idea recurrir a la terapia cognitivo-conductual, pero, sin embargo, los buenos sedantes serán útiles para acelerar el proceso de curación y eliminar síntomas como pulso rápido, temblor, fatiga y debilidad.